La edad en la que se embarazan las jóvenes ha ido disminuyendo, de acuerdo a las experiencias que se han registrado en la Preparatoria de Lagos de Moreno de la Universidad de Guadalajara. “Cada vez menos, las jóvenes se embarazan en la preparatoria, ahora es en la secundaria, es decir entre los 12 y los 14 años. Por eso estamos recibiendo a jovencitas que ya tienen a sus bebés. En el semestre actual, diez estudiantes de la Preparatoria de Lagos de Moreno son madres adolescentes y el calendario anterior eran 16”, detalló el director del plantel, doctor Roberto Castelán Rueda.

El también investigador considero que las problemáticas de educación sexual pueden abordarse desde la reflexión de los propios jóvenes y no debe ser tomado como asuntos de moralidad.

“No está bien orientado el problema si lo vemos como un tema con orientación moralista o superficial. Para nosotros tiene que ver con proyectos de vida con los jóvenes, sobre su propia búsqueda de la sexualidad. Hay que enseñarlos a construir su propio esquema de valores”.

A partir de esta problemática surgió el programa denominado “Todo a su tiempo... más vale prevenir que lamentar”, mismo que está conformado por talleres, conferencias, paneles y otras actividades sobre temas como: sexualidad responsable, habilidades sobre la vida, manejo de emociones, solución de problemas, diversidad sexual, enfermedades de transmisión sexual, identidad de género y homofobia, entre otros.

“Es un programa permanente con distintas acciones, no queremos centrarnos en una sola sino ver distintas formas para que los jóvenes tomen conciencia de lo que significa ser padres en la adolescencia”, explicó el académico.

Entre los paneles que han realizado se encuentra el que encabezó una pareja homoparental que tiene hijos, quien compartió su experiencia con los bachilleres y otro que abordó la problemática de violencia en el noviazgo. También han tenido lugar foros donde las jovencitas cuentan las dificultades a las que se han enfrentado por ser madres a temprana edad.

“Todos estos temas están entrelazados. Muchas veces el embarazo es producto de chantajes de la pareja”, refirió Castelán Rueda.

Añadió que hombres y mujeres, principalmente de primer semestre, participan en las actividades debido a que un embarazo en la adolescencia implica dos deserciones: la del padre que sale a trabajar y la de la madre, que se hace responsable del hijo. Por ello, psicólogos y sexólogos, así como asociaciones civiles y organizaciones públicas participan en la organización de las diferentes jornadas. Las próximas tendrán lugar a inicios del siguiente calendario escolar.